Somos seres que necesitamos estar conectados con nuestros vínculos, es decir que somos seres de comunicación, somos sociales y es por ello que nos aferramos a lo que sentimos “nuestro” Debemos sanar todos los duelos ya sea por des-encarnación, por separación o cambio de etapas de la vida. Debemos hacer el duelo de cada cambio, ya sea con respecto a personas o cosas: jubilaciones, hijos que se han mudado, emigraciones, cambio de empleo, mudanza, separación, muerte, menopausia, cambio de etapa, etc. No trabajarlos, nos lleva a un estancamiento emocional, bloqueando, trabando nuestro avance social, vincular, material, corporal y espiritual. Aletargando nuestra evolución.